El 46% de los conductores que hay actualmente en España no se revisa la vista, tal y como se indica en un estudio elaborado por el Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas.
Una cifra poco halagüeña teniendo en cuenta que, según comentan los expertos, hasta el 90% de la información que se percibe cuando se conduce llega a través de este sentido. Razón por la cual debería revisarse la vista, al menos, una vez al año, independientemente de las condiciones fisiológicas del conductor –si se añaden otros factores de riesgo como la edad, estos chequeos deberían ser más frecuentes-.
Igualmente, el informe revela que el 33% de los conductores no se protege del sol con gafas mientras está al volante, incluso si normalmente se emplea algún tipo de corrector visual o si se es mayor de 45 años –edad a partir de la cual se considera que existe un mayor riesgo de perder facultades en la carretera-.
Este hecho ha sido calificado como negativo por parte de los especialistas, ya que una exposición excesiva a los rayos ultravioletas puede derivar en graves daños oculares como cataratas o degeneración macular, o en problemas como fatiga visual o deslumbramiento –que pueden ser causa de accidentes-.
De la misma forma, se recomienda prestar siempre atención a algunos síntomas que se manifiestan cuando se conduce y que alertan sobre posibles problemas en la vista:
- Dificultades para distinguir figuras alejadas en la carretera.
- Percepciones erróneas de las distancias –por ejemplo, si se tiene problemas a la hora de tomar desvíos, ya que no siempre responde a despistes o distracciones-.
- Dificultad para conducir de noche o en situaciones con poca luz –no se enfoca bien, se siente un cansancio excesivo, se perciben los deslumbramientos con mayor intensidad de la normal, etc.-
Por otra parte, y aunque no se manifiesten estas condiciones, conviene seguir unas sencillas pautas de comportamiento que mejoran el mantenimiento de la salud ocular y pueden evitar sustos en la carretera.
Así, por ejemplo, desde las autoescuelas inciden siempre en la importancia de mantener los cristales siempre limpios para no forzar la vista, evitar el abuso del aire acondicionado –sobre todo si se usan lentillas- para que no se reseque el globo ocular y prevenir la fatiga general con paradas cada 200 km. o dos horas.